La homologación

La elección de llantas de las llamadas compatibles o equivalentes y originales, evitan los trámites de la homologación. Además, las llantas compatibles son más económicas en el mercado. Pero si lo que quieres es cambiarlas por otras que en un principio no coinciden con lo estipulado en la ficha técnica de tu coche, habrá que realizar un trámite para homologarlas.

El diámetro

A mayor tamaño de la llanta, más pequeño debe ser el perfil del neumático. 

La anchura de la llanta

En principio, la llanta puede ser todo lo ancha que quieras, siempre que se ajuste en unos niveles lógicos al asiento del neumático. Es muy importante que la llanta no roce en la carrocería, en la mecánica, amortiguadores, etc., porque el coste será mucho mayor al tener que reparar este daño extra.

El tamaño ideal del buje

Cada vehículo tiene un diámetro de buje determinado. Se trata de medidas estandarizadas, pero que varían de un coche a otro. El buje es un saliente del eje en el que se sujeta la llanta para su atornillado. Si el tamaño de buje de la llanta y el del neumático no coinciden, entonces habrá que usar centradores para llantas.

Las llantas se pueden agrupar en dos grandes categorías según el material del que están hechas: acero o aluminio.

Aunque en función de la calidad y mezcla de materiales, las puede haber también de magnesio (más ligeras que las de aluminio) y de fibra de carbono (para vehículos de alta competición).

Los clientes suelen preferir las llantas de aluminio a las de acero porque pesan menos, tienen una estética deportiva con grandes agujeros de aireación y ofrecen buenas prestaciones.

Con un buen mantenimiento, cuidado y la adecuada atención, la vida útil de unas llantas de calidad ronda aproximadamente los 5 años. Sin embargo, este cálculo general puede variar dependiendo de factores como el estado del terreno por el que conducimos a diario, el uso que hacemos del coche o nuestro tipo de conducción. Mientras más eficiente sea, menos desgaste tendrán las ruedas.

Una de las primeras cosas que se debe hacer es revisar la fecha de fabricación de las llantas. Ésta se encuentra en el lateral del neumático.

Seguridad

Utilizar unas buenas llantas proporciona una mayor seguridad en la carretera ya que, gracias a su resistencia, se puede recorrer grandes distancias sin peligro de desgaste.

Evitan el deslizamiento en las calzadas mojadas, ya que tienen una gran tracción para cualquier clima. También aumentan la eficacia del frenado en caso de emergencia.

Comodidad

Las llantas adecuadas pueden mejorar la comodidad del vehículo.

Unas llantas que no se ajusten al neumático de forma adecuada pueden producir malas amortiguaciones de vibraciones que resultan muy molestas, además de peligrosas.

Ahorro

Las llantas pueden permiten ahorrar en el consumo de combustible. Ya que si la llanta es de calidad soportará mejor el peso de la carga, lo que hará que el vehículo necesite gastar mucho menos combustible.

En camiones y vehículos grandes esto puede suponer un ahorro de unos 10 kilómetros, dado el gran peso que transportan durante largos trayectos.

Estética

Las llantas también son un elemento de estética y personalización del vehículo.

En el mercado existe una gran variedad de modelos de llantas que pueden cambiar totalmente la imagen de un vehículo y además con un estilo propio.